08 Nov Caracterizamos bacterias tolerantes a metales según su capacidad para promover el crecimiento vegetal
Uno de los objetivos de PHY2SUDOE es implantar estrategias de conservación de la biodiversidad endémica propia de algunos emplazamientos contaminados (e.g., flora metalícola, bacterias, etc.) por su valor intrínseco y utilitario. Como parte de este objetivo, la Universidade Católica Portuguesa y NEIKER están trabajando en el aislamiento y caracterización de bacterias de entornos metalíferos según su capacidad para promover el crecimiento vegetal (PGPB).
Entre los rasgos de promoción del crecimiento vegetal se encuentran (i) la actividad ACC-deaminasa (el ACC es un precursor del etileno que en las plantas está implicado en la respuesta al estrés; la actividad ACC-deaminasa desvía la utilización del ACC hacia la producción amonio y α-cetobutarato), (ii) el ácido indol-3-acético (el IAA es una auxina que tiene la capacidad de estimular la germinación, el crecimiento y la reproducción, así como proteger a las plantas frente a fuentes de estrés biótico y abiótico), (iii) la producción de sideróforos (las bacterias con capacidad para producir sideróforos pueden incrementar la disponibilidad de hierro para las plantas) y (iv) la solubilización de fosfato inorgánico (las PGPB con capacidad para solubilizar fosfato pueden convertir fosfato insoluble en formas disponibles para las plantas), entre otros.
Hasta el momento, se han aislado 57 cepas bacterianas de suelos del entorno minero de Lanestosa. Una vez caracterizadas, las bacterias más prometedoras serán almacenadas en un biobanco. Así, se podrán emplear en futuras actuaciones de fitorremediación o fitogestión.